viernes, 11 de enero de 2008

[Arquitectura & Cine: Terry Gilliam]

Director de cine estadounidense, dibujante, creador de películas de increíble fantasía visual. Nació en Minneapolis, estudió Ciencias Políticas en Los Ángeles y trabajó como ilustrador en Nueva York. En 1967 se trasladó a Londres donde estudió animación con Bob Godfrey. Su trabajo en este campo para televisión le llevó a unirse a los Monty Python en 1969. Los sketches de animación que creó para los programas de esta compañía revelaron la gran imaginación de Gilliam. La película que marcó su debut como director, Los caballeros de la mesa cuadrada y sus locos seguidores (1974, codirigida con Terry Jones), fue la más imaginativa de la serie de Monty Python, muchos de cuyos filmes coescribió. La bestia del reino (1976), su primera película en solitario, aunque aún del tipo Monty Python, ahondó más en la visión escatológica de la edad media ya avanzada por Los caballeros de la mesa cuadrada. Los héroes del tiempo (1981, con Sean Connery) era una obra más personal, una visión infantil y de pesadilla a un tiempo, en la cual se contemplaba la historia como una serie de trampas sádicas. Con Brazil (1985, interpretada por Jonathan Pryce), Gilliam consiguió unos efectos visuales excelentes en su
divertidísima reinterpretación
del clásico de Orwell 1984 como un circo de seres monstruosos. Sin embargo, su imaginación voló aún más alto con Las aventuras del barón de Münchausen (1989), una de las películas más caras de su momento que estuvo plagada de dificultades de producción y fue una catástrofe de taquilla. Desde entonces, ha intentado restringirse a la dirección de los guiones de otros. Aunque visualmente impresionante, a la fantasía futurista de Doce monos (1995, protagonizada por Bruce Willis), le falta algo del vigor que Gilliam era capaz de aportar a sus propias creaciones.


Enfoque en la arquitectura en el cine: Terry Gilliam es uno de los pioneros en utilizar el interior de un edificio como locación para su película "Brazil", marcando así una especie de precedente. Entre las obras arquitectónicas que presenta, se encuentran edificaciones con estilo futurista y contemporáneo. Se basa en el uso de arquitectura moderna y entre sus tomas resalta la clara idea de un centro bien marcado y definido, así mismo entre sus animaciones, utiliza recortes de fotografías de obras arquitectónicas antiguas como paisaje para sus caracteres animados. Y, tomando como referencia el ejemplo del marco, Gilliam enmarca definidamente las obras arquitectónicas en sus tomas cinematográficas, indicando que sobresalen del mismo y dando la idea de que continúan hacia ambos lados, poniendo nuevamente en evidencia la definición del centro dentro del cual ocurre el evento de importancia dentro de la toma.